El niño me paró en la vereda de la plaza. ¿Usted es Vaccaro?
-sí, soy yo. ¿Por qué?
n- porque la maestra me dijo que le preguntara a Ud. por algunas personas de la Ciudad.
-Bueno… ¿Qué personas?
n- Uno es el MAESTRO CHINO. ¿Usted lo conoció? Porque me dijeron que escribió un libro sobre él.
-Sí, claro que lo conocí. Era una persona muy conocida, toda la gente lo quería, y era fuente de consulta sobre muchos temas, pero especialmente sobre historia de Pan de Azúcar. De verdad escribí un libro sobre él, basado casi todo en un montón de entrevistas que yo le había grabado en un casetero, y que poco después de su muerte comencé a escuchar y a escribir.
n- ¿Era realmente chino?
-No, era un apodo que tenía desde niño. Era de acá. Desde niño andaba por estas calles. Su nombre era Ricardo Leonel Figueredo, y la gente lo llamaba cariñosamente “El Maestro Chino”
n- ¿Era bueno?
-Sí, era muy amigable, le encantaba compartir sus conocimientos especialmente con niños y jóvenes, pero con los grandes también. Solía estar de buen humor y sus historias eran muy divertidas, pero con un final abrupto, te quedabas esperando más. En las charlas de la calle era igual, te hablaba un rato, te estaba contando algo, y de repente te decía: “Bueno, chau, nos vemos” y como si tal cosa se iba.
n- ¿Daba clases en la Escuela?
-Dio clases muchos años en varias escuelas, también dio idioma español en el Liceo, pero no era lo único que hacía. De joven cantaba boleros, criaba canarios, fue comerciante, artista plástico (pintaba cuadros con paisajes y rancheríos), actor de teatro en un grupo que tuvo La Vieja Bodega, escribía cuentos que publicaba en el Diario “El Día” (que ya no existe), escribía poesías, publicó libros de cuentos, durante años hacía historias en mi programa de la Radio, investigaba sobre historia y sobre rastros indígenas en la zona, y conocía todo lo que pasaba en la Ciudad.
n- ¿Todo eso?
-Más que eso, porque fue político, ejerció como presidente de la Junta Local de Pan de Azúcar, integró la Comisión de Cultura y la Comisión del Museo Álvaro Figueredo, hacía discursos en fechas patrias, fundó la Vieja Bodega con Marita Pacheco de Blois… Y seguro que alguna cosa más.
n- ¿Era hermano de Álvaro Figueredo?
-No, era sobrino. Pero fue su tío Álvaro quien le sugirió que estudiara para maestro, y le pagó los gastos para que pudiera hacerlo. Pero si quieres, vas a la biblioteca y pides el libro “El Maestro Chino”, y allí hay mucho más.
– Muchas gracias, pero tengo otras personas para preguntarle.
-Está bien, pero deja para otro día. Hoy tengo que hacer los mandados. Y tú, ¿qué edad tienes?
n- Tengo 10 años. Estoy en quinto de escuela, en la 6, allí enfrente. Gracias por contestarme. Otro día lo busco.
-Quedamos así, dale saludos a tu maestra, que debe haber sido alumna mía en el Liceo…
–